Fin de año en casa de mi amiga Nerina, importantísimo momento junto a amigos que quiero muchísimo, junto al hermano de mi “ex hija” y junto a mi negro querido.
La pasamos realmente muy bien.
Los dos hablando muchísimo, no sabia realmente quien hablaba más, yo solamente me dispuse a estar atenta a que no faltara nada en la mesa, por suerte estuvo siempre presente Nikin que me ayudo en todo momento.
El morocho la pasó muy bien, llegó un poco tristón pero esa mirada fue desapareciendo con el transcurrir de las horas, hasta llegamos a correr la mesa y nos pusimos a bailar todos música brasileña, obviamente el monito fue la estrella de la noche, contando anécdotas, compartiendo nuestros proyectos y obviamente mostrando sus pasos en el baile.
Es inevitable olvidar las constantes peleas con Nikin antes de llegar a preparar todo para la cena, él enojado porque yo me colgué en el brindis de la oficina, y bue… tenia que festejar un poco con ellos también. Tomamos solo un poco pero realmente me habían pegado bastante mal las burbujitas y tuve que sostenerme del brazo de él para disimular un poco que no podía caminar muy derecha que digamos por la calle.
Después vino la recorrida en el taxi para encontrar un super abierto, a esa altura el otro ya me quería pegar, no encontrábamos nada abierto, y yo preocupada solamente por la bebida, entrando de bodega en bodega, tratando de conseguir mas botellitas de cervezas artesanales, y un par de vinitos para acompañar la comida, comida que seguía en espera siendo ya las 20 hs.
No hablábamos, ya ni siquiera nos mirábamos para no ladrarnos más. Todo se tornaba insoportable, el calor, la falta de comunicación, las caras de c…., la falta de verduras para hacer las ensaladas, etc.
Hasta que el taxista nos llevo a un lugar que aun seguía abierto y pudimos comprar lo que nos faltaba. Luego llegamos a casa, ya cansados los dos, yo con unas ganas de acostarme a dormir la siesta, ya no tenia ganas de festejar nada.
Después se estaba convirtiendo en misión imposible la tarea de llegar a casa de Neru con todas las cosas, no pasaba un solo taxi y el mal humor seguía en aumento.
Por suerte Neri vino enseguida a nuestro rescate, no podía creer que discutiéramos tanto por pleno Pellegrini, ya no sabia que decirnos para que paremos un poco.
Pero por suerte termino todo bien, la locura pasó y llegamos en buenos términos a la cena.
Obviamente a las doce todavía seguíamos cenando, yo mucho no comí porque el día anterior el morocho me había preparado un matambre a la pizza impresionante que sirvió para que no comiera por dos días aproximadamente, estaba tan rico!!!!!! Y fue por ese motivo que el día anterior no pude dedicarme a hacer nada para preparar la cena de fin de año, me colgué nuevamente pero en la casa de él, matambre a la pizza, vinito, champán y demás hicieron que desaparezca del planeta tierra por un día entero y nadie sabia de mi. Bue… también tenia que hacer el festejo en privado con él.
Nikin muriéndose de calor en el dpto, esperando que apareciera en algún momento, ya casi enojado por el abandono de mi parte, pero yo estaba preparada y para no escuchar reproches le lleve una porción de matambre a la pizza, santa solución, cambio la cara al toque.
Y así fue todo, todo muy tranquilo, al final las chicas me esperaban en MDM pero nuevamente me colgué y no aparecí nunca.
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